Por Hugo Sierra – Editor general
Con ánimo conciliador y un llamado a la unión para hacer posible la reconciliación entre los colombianos, que ponga fi n a la división que vive el país desde hace años, el nuevo presidente de la República, Gustavo Petro Urrego, inició su gobierno, que juró, estará apegado al cumplimiento de la Constitución y las leyes.
“Es la hora del cambio y hoy empieza la Colombia de lo posible”, aseguró el mandatario de izquierda en el discurso de posesión, en el que dijo que “la paz es posible si desatamos en todas las regiones de Colombia el diálogo social, para encontrarnos en medio de las diferencias, para expresarnos y ser escuchados”.
Con lenguaje moderado y sin hacer referencia a gobiernos pasados, envió desde la Plaza de Bolívar, emblema de la institucionalidad nacional, un mensaje claro a los colombianos: “tenemos que decirle basta a la división que nos enfrenta como pueblo. Yo no quiero dos países, como no quiero dos sociedades. Quiero una Colombia fuerte, justa y unida”.
Y un mensaje de urgencia para que también se acabe la división en el continente fue para Latinoamérica, cuyos mandatarios asistieron a la posesión, a la que invitó a trabajar unidos para enfrentar el cambio climático, salvar la selva de la Amazonía y defender la paz mundial. Así mismo, planteó la necesidad de cambiar la política de lucha contra las drogas.
A este sentido, le hizo conocer al país los compromisos que guiarán su gestión en los próximos cuatro años, en los que trabajará de cerca con la ciudadanía, visitando las regiones y escuchando a la gente. “El diálogo y el entendimiento marcarán nuestro gobierno”, dijo al referirse a los diálogos regionales que se van a convocar en todo el territorio nacional.
Ejes de su gestión Al reafirmar que su gobierno será de la vida y de la paz, el nuevo presidente se comprometió a trabajar para conseguir la paz verdadera y definitiva, para lo que aseguró va a cumplir el Acuerdo de Paz firmado en el gobierno Santos con las Farc.
Resaltó el cuidado que brindará el gobierno a través de programas sociales de asistencia a los abuelos, niños, discapacitados y a las personas que la sociedad ha marginado a lo largo de la historia.
“Empieza un gobierno paritario”, dijo Petro al afirmar que gobernará con y para las mujeres de Colombia. Expresó que la igualdad de género es posible y que ya es hora de combatir todo tipo de desigualdades, como las que existen en materia de oportunidades y salarios para las mujeres.
Para escuchar a los distintos sectores del país, aseguró que su gobierno será de puertas abiertas para todo el que quiera dialogar sobre los problemas del país, sin excepciones ni exclusiones. Exhortó a la construcción de un ‘Gran Acuerdo Nacional’ para fi jar la hoja de ruta de la Colombia de los próximos años
En esa dirección, insistió en que no gobernará a distancia ni encerrado en su despacho en la Casa de Nariño. Les pidió a todos sus ministros que hagan lo mismo, que estén en permanente contacto con la ciudadanía para escucharla.
Se comprometió a que todas las familias colombianas se sientan seguras y tranquilas con estrategias que se pondrán en marcha para combatir las distintas formas de violencia y delincuencia. “La seguridad se mide en vivos, no en muertos”, puntualizó. Al enfatizar que será un gobierno de ‘cero tolerancia’, dijo que habrá mano firme contra la corrupción, anunció que los organismos de inteligencia ahora se enfocarán en la lucha contra este fenómeno y prometió recuperar “lo que se han robado”.
“Colombia será potencia mundial de la vida”, reiteró al asegurar que se va a enfrentar la desforestación descontrolada de los bosques y se impulsará el desarrollo de energías renovables.
La industria nacional, la economía popular y el campo tendrán pleno desarrollo, sin distinciones ni preferencias, dijo el nuevo mandatario. “Vamos a desarrollar la sociedad del conocimiento y la tecnología”, anunció.
Este decálogo, como lo definió el propio Petro, se cumplirá con estricto respecto a la Constitución Política, aseguró al hacer referencia al artículo 1, lo que constituye un mensaje contundente de respeto al Estado de Derecho y a la institucionalidad democrática que se ha preservado durante de 203 años de vida republicana.
Para cumplir los compromisos adquiridos ante el país, el nuevo jefe de Estado expresó varias palabras clave al posesionar a los ministros y funcionarios de primer nivel que integran su gabinete: trabajar, gobernar, escuchar, dialogar, proteger, desarrollar y cumplir.
El punto de partida para cumplir estos retos son las reformas, económica, política y social que llevará Petro al Congreso de la República en el primer año de mandato para asegurar su aprobación. Para ello, escogió un grupo de ministros con experiencia y manejo político y técnico que jugarán un papel clave hacer realidad el cambio.