Los primeros 100 días de mandato de los alcaldes que iniciaron su cuatrienio en enero pasado no han sido nada fáciles. El arranque de los nuevos gobiernos de los 11 municipios de la Región Sabana Centro ha tenido múltiples dificultades en lo social, económico y ambiental, que han demandado la toma de decisiones urgentes.
Cuando apenas se estaban conformando los equipos de gobierno, varios alcaldes se vieron abocados a sortear la crisis ambiental generada en los albores del nuevo año por el fenómeno climático de El Niño: incendios forestales y sequía. Municipios como Nemocón, Zipaquirá, Gachancipá y Sopó, vivieron emergencias en sus territorios por varios días.
Las altas temperaturas registradas en enero y febrero repercutieron negativamente en el sector agropecuario y disminuyeron el caudal de algunos ríos, provocando el desabastecimiento de agua, lo que llevó a que algunos alcaldes de la región a tomar medidas urgentes para racionar el liquido.
Aunque el país esta viviendo algunos días de lluvias, el fantasma del racionamiento de agua y de energía ronda a los colombianos por la sequía que ha provocado El Niño en gran parte del territorio nacional. Hoy existen problemas de desabastecimiento del recurso hídrico en municipios de los departamentos de Boyacá, Santander, Cundinamarca y la Costa Caribe.
La seguridad, bandera de todos
Otro de los temas que atendieron los nuevos alcaldes en los primeros 100 días de gestión frente a sus municipios, fue el de seguridad, que se convirtió desde el día 1 en una prioridad ante el clamor de los habitantes de la región Sabana Centro de medidas para combatir los diferentes delitos.
Según los resultados de la Encuesta de Percepción Ciudadana 2023, realizada por el Programa Sabana Centro Cómo Vamos, la percepción de seguridad en los 11 municipios se encuentra en el 44%, lo que se constituye en la mayor insatisfacción de los habitantes de esta provincia de Cundinamarca (ver nota anexa).
En una especie de estrategia conjunta, la mayoría de los alcaldes pusieron en marcha acciones para devolverle la tranquilidad a la ciudadanía. Hoy es notoria la presencia permanente de la Fuerza Pública en las calles de los municipios para combatir la delincuencia común, las redes de microtráfico y prevenir los delitos de alto impacto.
Chía, Cajicá, Zipaquirá y Tocancipá, entre otros municipios, han lanzado una ofensiva con operativos permanentes y focalizados contra las bandas de delincuentes y los expendedores de estupefacientes para desarticularlas y judicializar a sus integrantes.
En su mayoría los mandatarios se han unido a la cruzada nacional para combatir el microtráfico, fenómeno que se presenta a nivel nacional. Con la expedición de decretos municipales implantaron restricciones al consumo de estupefacientes en los parques, zonas verdes y en los alrededores de los colegios.
En el primer Consejo de Seguridad Ampliado de Cundinamarca, el gobernador Jorge Emilio Rey trazó la estrategia para fortalecer la seguridad en los diferentes municipios del departamento luego de analizar el comportamiento de los delitos en el primer trimestre del año en las 15 provincias.
Coordinar una comunicación estratégica y permanente entre las diferentes entidades para hacer seguimiento diario a la actividad delictiva, definir las necesidades de dotación, tecnología y movilidad para crear un plan de inversión conjunto y fortalecer la coordinación de todas las instituciones, son algunas de las acciones que se adelantarán en un trabajo conjunto entre comunidad, gobierno y Fuerza Pública.
Sin presupuesto
En los primeros 100 días de gobierno, los alcaldes también han tenido que enfrentar las dificultades financieras de sus municipios. Las arcas quedaron vacías al terminar el periodo de los mandatarios salientes. “Nos dejaron la olla raspada”, es una expresión que se escucha de boca de la mayoría de funcionarios de las administraciones municipales.
Ante la critica situación financiera, una de las primeras acciones que han emprendido es presentar Proyectos de Acuerdo a los Concejos Municipales para buscar la aprobación de adiciones presupuestales que les permitan responder a los gastos urgentes y recurrentes de la vigencia fiscal del 2024.
Con la ayuda de Dios y con responsabilidad vamos a hacer todos los esfuerzos para conseguir los recursos que alcancen para atender las necesidades de la comunidad y cumplir con lo que prometimos en la solución de sus problemas más apremiantes
dijo uno de los alcaldes de Sabana Centro. En las mesas de trabajo que se hicieron en los diferentes municipios para construir el Plan de Desarrollo de los próximos cuatro años, la ciudadanía propuso programas y planes en materia de empleo, emprendimiento, educación, salud, medio ambiente, infraestructura vial y movilidad.
Los aprietos financieros solo se podrán superar a partir de junio próximo cuando se aprueben y se pongan en marcha los Planes de Desarrollo que cada uno de los alcaldes de Sabana Centro presentó como hoja de ruta para el periodo 2024-2027.
Aún están ejecutando los Planes de Desarrollo de los mandatarios que salieron en diciembre pasado.
Planes de desarrollo
El despegue de los gobiernos de Sabana Centro tampoco ha sido fácil por la urgencia de formular y construir con la participación ciudadana, como ordena la Ley, los Planes de Desarrollo Municipales (PDM), que son la hoja de ruta de los próximos cuatro años.
En la elaboración de los mismos, tienen especial importancia las propuestas que ha hecho la comunidad en las distintas mesas de trabajo realizadas durante los primeros meses del año por los mandatarios en sectores urbanos y rurales de sus municipios. En este proceso han contado con la asesoría técnica del Departamento Nacional de Planeación (DNP).
El 30 de abril próximo es la fecha límite para entregar los Planes de Desarrollo a los 11 concejos municipales de Sabana Centro.
(Cajicá, Chía, Cogua, Cota, Nemocón, Gachancipá, Sopó, Tabio, Tenjo, Tocancipá y Zipaquirá), corporaciones que tendrán plazo hasta el 31 de mayo para aprobarlos.
En su programa de gobierno para los próximos cuatro años los mandatarios coincidieron en priorizar la recuperación de la seguridad, el mejoramiento de la movilidad, la construcción de vías, la calidad en la prestación de los servicios públicos, la protección del medio ambiente, la ampliación de la oferta cultural y deportiva y la generación de empleo.