1. Exhiba los alimentos debidamente
Si almacena los productos alimenticios en vitrinas o estantes podrá protegerlos de la luz solar, el aire u otros elementos que puedan deteriorar la calidad y, en consecuencia, provocar que se alteren las propiedades nutricionales.
2. Disponga del baño en un lugar aparte
Las unidades sanitarias de su establecimiento comercial deben estar separadas del lugar donde vende alimentos de manera directa. Esta norma sugiere dividir los espacios para evitar posibles contaminaciones que afecten a los consumidores.
3. Ofrezca los productos rotulados
Cada envase, empaque o embalaje debe llevar marcado o grabado la identificación de la empresa que lo fabricó y exhibir datos como la fecha de vencimiento y tabla nutricional, si es un producto comestible, para facilitar su reconocimiento.
4. Ordene y limpie los estantes
Una tienda aseada y agradable a la vista atraerá más clientes. Es importante que organice y limpie de manera regular los espacios donde muestra sus provisiones para que estas se conserven de la mejor manera y no cambien sus condiciones.
5. Separe de acuerdo con el contenido
Tener claro que productos como detergentes y jabones van separados de los alimentos perecederos le ahorrará problemas. Es conveniente revisar periódicamente la distribución en busca de ofrecer siempre lo mejor a los clientes.